sábado, 9 de abril de 2011

TANUKI EN EQUIPO

No habia nada planeado. Llamó Yoyo para  hacerme una visita, charlar un rato de bonsais y de amigos comunes, de lo divino y humano.                                                                                                         Vimos unos arbolinos y le comenté una idea que me rondaba por la cabeza desde hacia tiempo.
Tenia un tronco de crataegus con buena pinta y uno pequeño que habia dejado crecer el año pasado con la intención de hacer un tanuki, mi primer tanuki. Dicho y hecho, nos pusimos manos a la obra y en un momento montamos el taller.
Teniamos un dia fantástico, formones, dremel, gubias y .....ganas de hacer algo en común

acompañado de unas botellinas de sidra. ¿Seria esto la poción mágica?
Vamos poco a poco con el trabajo y de vez en cuando hacemos una comprobación de como va la cosa.

El espino está convenientemente envuelto en plástico para que no se seque durante la preparación del tronco. Ya la habiamos quitado una rama,  nos interesan dos para darle dos copas a distinto nivel.
Yoyo sigue haciendo el camino de las ramas en el tronco mientras yo preparo el sustrato y una maceta de la de las pruebas para tenerlo en ella una bueeeeeena temporada. Hasta que madure.
Una vez que acabamos con los preparativos de maceta y acanaladuras para las ramas, un culín de sidra, preparamos el tronco para fijarlo en la maceta, otru culín... Líquido de jim para retardar la pudrición, tres tornillos para dejarlo estable y en la posición que nos interesa y unos cáncamos para pasar el alambre de fijación.

Las consabidas capas de drenaje y sustrato, y con cuidado de no deshacer mucho el cepellón empezamos con la tarea de encajar las ramas en los sitios que se habian preparado.

Poco a poco fuimos colocando las cosas en su sitio. Nos costó poco trabajo el colocarlo porque estaba bien estudiado lo que queriamos hacer. Fijamos las ramas con bridas de plástico y en algunos sitios pusimos trozos de corchos, de las botellas de sidra que nos tomamos,para ceñir bien las ramas al tronco y a las acanaladuras.

Se aprecia bien como se van ciñendo al troco y a los pasos que se le hicieron.
Queda  por hacer todo el trabajo de la madera, esa será otra. Primero que el arbolìn no acuse mucho la paliza que le dimos. Lógicamente en cuanto tuvimos el trozo primero fijado al madero ya tapamos  el cepellón, que se deshizo un poco, con el sustrato que estaba preparado.
En esta última foto se puede ver el resultado de una mañana productiva , desestresante, y enriquecedora.

Lo pasamos muy bien. Agradecer a Marisol el reportaje fotográfico, no entero. Y a Yoyo su inestimable ayuda. Con todo esto y unas buenas risas.
¿Que más se puede puede pedir?                                                                                                           Para terminar le dimos una buena regada con agua de lluvia y un poco de vitamina B que dicen que las va bien despues de una paliza, y nosotros a comer y a esperar la próxima.

5 comentarios:

  1. "Con la ayuda de un vecino (amigo en este caso) mi padre mató un cochino". Por las caras de la ultima fotografía y por el numero de corchos se nota que no faltó "gasolina". Así salió perfecto el trabajo.

    Saludos a ambos.

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  2. Tras este primer taller, sin prepararlo, sin planos,sin documentación alguna.... sin esquemas... y viendo las fotos, se me ocurren un par de cosas: Que tiemble el Tim Bonsai de nuestros primos-hermanos y que tás más calvo que yo!!!!!

    En las dos últimas fotos, el árbol más bien da una impresión negativa, por ese par de palos en V. He de decir que detrás de ellos hay madera para trabajar e incluso un jin con un aspecto muy elegante. Será todo un disfrute en otro taller llenarse de viruta y sacar polvo con la dremel y la lija.... Ya puedes preparar sidra para el secañu de garganta.

    Un abrazo.

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  3. Jo, Ángel: ¿qué hicisteis? que maravilla!!!!
    La sidra puede con todo, bien lo sé yo ;)))))))))
    buen trabajo, buen reportaje Marisol

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  4. Me despisto unos días y te encuentro enfrascado en un tanuki y todo...buena la compañía, bueno el resultado.

    Pero...con una fotógrafa casi que profesional,¡así cualquiera!!!,jejeje.

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  5. Gracias Martin. El trabajo tiene futuro, al menos por la cantidad de trabajo que le queda.
    Yoyo, tengo la tapa de las ideas muy clara y tenemos para un par de talleres de serrín.
    Ya ves Charo, me dejais un dia y la liamos.
    ¿Que tal Alberto?, ya sabes,con buena compañia hasta un tanuki o lo que se tercie.

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