UN PASO MÁS.

Hacía tiempo que la idea me rondaba por la cabeza, pero hasta ahora no se ejecutó.
Estuve tallando macetas en barro blanco sin chamota con la intención de seguir con las pruebas de color y me acordé de esta idea.
Aprovechando que estaba Helena, mi hija, en casa, nos pusimos a trabajar. Ella me hizo los dibujos que luego coloreé con lápices de cerámica.

El siguiente paso es darles el esmalte a pistola. Para esta labor recurrí a Jesús Ontanillas. Mi "profe"

En esta fase se oculta el dibujo.

Y una vez cocida en "alta" este es el resultado.

Algunos colores desaparecieron, pero el resultado me gustó.
Esta maceta mide 10'5x 7'2x5'2 cm.
Hay otra un poco más pequeña 7´4x5'8x3'3 cm.

Los dibujos están inspirados en grabados japoneses antiguos.
Iremos sacando conclusiones con respecto a los colores y a lo mejor hay que hacer la coción de los dibujos en "baja" para tener una paleta de colores mayor.
Como experiencia fué muy gratificante y seguro que la repetiré.